Mediante un plan impulsado por Ingeniería Comercial y las Direcciones de TI y Operaciones, estudiantes de pre y postgrado tienen clases con modalidad presencial y online de manera simultánea.
Distintas salas de la UANDES fueron reacondicionadas para poder implementar un sistema híbrido de clases presenciales y virtuales en vivo. En este modelo, que está en una fase piloto, el profesor y los alumnos que quieren, pueden compartir presencialmente la experiencia de una clase física, mientras que simultáneamente, los otros alumnos lo hacen de manera online.
“Nuestra principal tarea es poder asegurar un buen proceso formativo y, en ello, el campus juega un rol esencial. Sabemos que muchos alumnos tienen dificultades en sus casas, se desconcentran o por distintos problemas de conectividad no pueden sacarle el máximo provecho a la clase, por lo que este proyecto pretende ser una alternativa para que no se generen brechas de aprendizaje”, sostuvo Karin Jürgensen, decana de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales.
Cada sala cuenta con distintas medidas de seguridad como por ejemplo, un espacio delimitado para que el profesor pueda moverse, las primeras filas se inhabilitan como medida de prevención, un kit de sanitización para que cada persona limpie su espacio, entre otros. Asimismo, los alumnos están sentados por mínimo un metro de distancia y firman un documento con sus datos y con un número de identificación para poder medir trazabilidad y realizar seguimiento en caso de cualquier situación de positividad o contagio de coronavirus.
Mediante dos cámaras y un micrófono ambiente, los estudiantes que están en sus casas pueden ver y escuchar en tiempo real al profesor y a sus compañeros, lo que permite interacción directa con la sala de clases. Por otro lado, a través del software y cámara de Kaptivo, se captan las distintas anotaciones en la pizarra y se transmiten de manera digital para cualquier alumno que esté con su computador, ya sea de manera presencial o virtual.
“Como Universidad, tenemos que buscar formas creativas e innovadoras para adaptarnos a los tiempos actuales centrándonos en el alumno y su aprendizaje. Este sistema híbrido permite que las clases sean simultáneas y participativas, si un alumno en su casa no entendió algo, puede interrumpir al profesor al igual que lo hace alguien que está presencialmente”, cuenta Francisco Ulloa, vicedecano de alumnos de ICOM. “Asimismo, este plan piloto es escalable y autoadministrable, no es necesario un técnico en la sala, sino que el profesor utiliza Zoom u otra plataforma para quienes están de manera remota y puede comenzar su clase”.
En esta primera semana, se ha priorizado el retorno para aquellos cursos de primer año, con el objetivo de que los alumnos que no pudieron conocer el campus, ni a muchos de sus compañeros, puedan tener su primera experiencia en las salas de la universidad.
“El primer día como universitario es algo que no se olvida nunca y nuestra idea es darle a los estudiantes ese espacio para que se conozcan, para que interactúen de manera directa con el profesor y tengan una mejor experiencia en la propia universidad”, concluye Francisco.
Si bien en su mayoría las clases durante este semestre seguirán siendo a distancia, este plan piloto permite que tanto alumnos y profesores puedan volver a encontrarse o incluso conocerse por primera vez en persona.