Hace tres años, el profesor de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Aplicadas, Juan Eduardo Pérez, comenzó un nuevo trabajo de investigación que nace con el requerimiento de una de las empresas productoras de explosivos en minería más importante del país. Un estudio que fue publicado recientemente en una de las revistas más importantes del área de la Ingeniería Industrial, “International Journal of Production Research”, rankeada número 4 de 169, indexada WoS, Q1.
El trabajo, tal como lo anuncia su título “Decision support for fleet allocation and contract renegotiation in contracted open-pit mine blasting operations”, debía resolver dos problemáticas, ambas producto de la baja en el precio del cobre e íntimamente relacionadas, que tienen que ver con la necesidad de optimizar los recursos, específicamente mejorando la productividad operacional en el envío de camiones que entregan los explosivos; y responder a la presión de los propietarios de minas en la renegociación de los contratos con los contratistas que proveen los explosivos para operaciones de voladura de minas a cielo abierto.
Lo que hizo -explica el profesor- es llevar todo el proceso que se realiza -desde que los camiones llegan a los silos (depósitos de almacenamiento de productos químicos), se cargan con los compuestos químicos que conforman el explosivo, y se van a las grillas donde vierten estos productos- a un modelo matemático integrado para la operación de voladura, teniendo en cuenta a múltiples propietarios con varios pozos abiertos, y donde es capaz de determinar, por ejemplo, desde la llegada de los camiones, la coordinación con la mina, el octanaje y hasta qué camión va a cuál mina, entre otros.
“La implementación de este modelo por parte del contratista de explosivos, no solo le significó un 15% de baja en los costos, sino también contar con las herramientas para renegociar los contratos con las minas”, argumentó el profesor Pérez. Esto, porque la flota que exigían las minas respecto al número de camiones, por tema de seguridad, estaba por sobre la necesidad real, explicó.
El trabajo demoró un año y medio en levantar datos, medio año en la implementación y otro año en la preparación del paper y el trabajo científico, donde también participaron los profesores de Ingeniería UANDES, Rosa González y Sebastián Maldonado.
Para el académico, lo más destacable, además de la capacidad de modelar los requisitos de mezcla que se requieren para la producción de los explosivos, un aspecto importante dada la naturaleza peligrosa de los compuestos químicos que se transportan, es demostrar el impacto transversal que tienen este tipo herramientas en la industria.
En general, las empresas suelen tomar la decisión en tres niveles: estrategia, táctica y operaciones, pero no de manera coordinada. “Con este modelo, las tres se integran, se logran bajar los costos y tomar decisiones estratégicas al mismo tiempo para toda la organización”, comenta.
“Hoy en Chile estamos muy atrasados en esta materia, pero con la llegada de las grandes empresas, las industrias se han visto más llanas al uso de modelos matemáticos para definir sus precios, sus logísticas, y todo. Los que no se están subiendo al carro, simplemente se están quedando fuera”, concluyó.